Del 14 de agosto al 30 de septiembre, Viajes Palacio y el estado de Puebla se unen para rendir homenaje a una de las cocinas más emblemáticas de México con el Festival Sabores de Puebla, una experiencia culinaria que estará disponible en El Restaurante Palacio, dentro de El Palacio de Hierro de CDMX y el EDOMEX. Una excusa perfecta y deliciosa para saborear lo mejor de Puebla y, por qué no, celebrar las Fiestas Patrias.
Este festival no es solo una propuesta gastronómica, sino una forma de contar historias a través de los ingredientes, los aromas y las técnicas que han hecho famosa a la cocina poblana dentro y fuera del país. Desde los antojitos de comal hasta el icónico chile en nogada, Sabores de Puebla es una carta de amor a la tradición, al sabor casero y a la identidad mexicana.
Comida poblana en la CDMX
El menú matutino es un viaje directo a los mercados y cocinas familiares poblanas. Comienza con unas memelas poblanas, hechas con masa de maíz criollo, rellenas de frijoles refritos, coronadas con huesillo y bistec perfectamente cocido al comal. Una preparación sencilla a primera vista, pero que destaca por la intensidad de sus sabores y la calidad de sus ingredientes.
Si prefieres algo más clásico, puedes optar por el trío de chalupas al comal, pequeñas joyas de la gastronomía popular que combinan salsa roja, verde y un toque de cebolla picada. Cada bocado es una muestra de cómo lo cotidiano puede transformarse en alta cocina cuando se cuida el detalle.
Menú sabores poblanos en El Restaurante Palacio
La hora de la comida en el Festival Sabores de Puebla se convierte en una auténtica experiencia sensorial. Comienza con una crema poblana, elaborada con granos de elote fresco, cremosa y reconfortante, perfecta para abrir el apetito y preparar el paladar para los sabores más complejos que vienen después.
Uno de los platos fuertes del menú es el texmole de res, un platillo tradicional. La carne se cocina lentamente en un caldo espeso con chiles tatemados, lo que le da un sabor ahumado, profundo y ligeramente picante.
También se ofrece un mixiote en adobo con salsa, envuelto y cocido al vapor hasta alcanzar una textura suave y jugosa, acompañado de témelas (una especie de tortillita gruesa) para hacer barquitos y no dejar ni rastro del adobo.
Y, por supuesto, no pueden faltar los tacos árabes, una fusión heredada de la migración libanesa a Puebla, preparados con carne sazonada al estilo shawarma y servidos en pan pita o tortilla de harina, con esa mezcla de especias que enamora desde el primer bocado.
Platillo estelar, el chile en nogada
El protagonista absoluto de este festival es, sin duda, el chile en nogada capeado, preparado según la receta tradicional: poblano relleno de picadillo con carne, frutas de temporada, especias y almendras, bañado en una nogada cremosa hecha con nuez de castilla fresca y decorado con granada y perejil. Un platillo que no solo representa a Puebla, sino también el espíritu de México.
Y sí, viene capeado, como debe ser. Porque aquí se respeta la receta original y se honra la técnica que da al chile en nogada ese sabor y textura inconfundibles. La experiencia se completa con un coctel especial preparado con mezcal, jugo de fresa y limón: refrescante, ligeramente dulce y con un toque ahumado que armoniza perfecto con los sabores del menú.
El postre no se queda atrás. La crema poblana, dulce y sedosa, hecha a base de leche y vainilla, es un final suave que equilibra el festín anterior sin empalagar. Una manera sutil de cerrar una comida que, en cada platillo, logra contar la historia de un estado lleno de cultura, color y sazón.
Sabores de Puebla en el Palacio de Hierro
El Festival Sabores de Puebla es, además, una gran opción para celebrar las Fiestas Patrias. Ya sea en un desayuno con amigos, una comida en familia o una cita especial, este festival ofrece una manera elegante y auténtica de reconectar con nuestras raíces a través de la gastronomía.
En un entorno cuidado y elegante como las sucursales de El Restaurante Palacio en toda el área metropolitana, cada plato se convierte en una celebración de México, de Puebla y de todo lo que representa la buena cocina.