Guillermo del Toro regresa a las raíces del terror gótico con una de las películas más esperadas del año: Frankenstein, su adaptación del clásico de Mary Shelley. Antes de llegar a Netflix el 7 de noviembre, el cineasta tapatío decidió que su adaptación de la historia llegue primero a los cines mexicanos, en un estreno limitado que comenzará el 23 de octubre de 2025.
Del Toro eligió un camino más íntimo: llevar su película a salas independientes, culturales y universitarias.
En palabras del propio director, Frankenstein es “una historia sobre la soledad, la creación y la responsabilidad de jugar a ser Dios”. Más que un relato de horror, es una reflexión sobre el deseo humano de trascender los límites de la vida.
El reparto: Oscar Isaac interpreta al obsesivo Víctor Frankenstein; Jacob Elordi da vida a la criatura; Mia Goth, musa del cine de terror contemporáneo, aporta su enigma característico; y Christoph Waltz completa el elenco. Producida por Netflix y distribuida en México por Pimienta Films, la cinta promete ser un espectáculo visual y emocional que sólo Del Toro podría concebir.
Cines seleccionados: dónde ver “Frankenstein” en México
Pimienta Films confirmó que Frankenstein tendrá una corrida limitada en cines alternativos, ideal para quienes quieran verla en pantalla grande antes de su llegada al streaming. En la Ciudad de México, las funciones se concentrarán en espacios emblemáticos para el cine de autor:
- Cineteca Nacional Xoco
- Cineteca Nacional de las Artes
- Cineteca Chapultepec
- Cine Tonalá
- La Casa del Cine
- Cinemanía Loreto
- Sala Julio Bracho (CCU)
- Museo Universitario del Chopo
- Cinedot Azcapotzalco
- Cinedot Tláhuac
- Linterna Mágica (Cinetop)
- Cinemas WTC
- Autocinema Coyote Insurgentes y Polanco
La película también se proyectará en otras ciudades del país, incluyendo Aguascalientes, Puebla, Baja California, Yucatán, Guanajuato y Jalisco, en espacios como la Cineteca Mexiquense, el Cinemubi de León, el Cineforo de Guadalajara, y varias sedes universitarias. Cada una ofrecerá funciones especiales y, en algunos casos, proyecciones acompañadas de charlas o presentaciones.
La decisión de Guillermo del Toro de evitar a Cinépolis y Cinemex es un mensaje. En tiempos donde el streaming domina la conversación y las salas pequeñas luchan por sobrevivir, el director mexicano apuesta por rescatar la experiencia de ver cine. En sus propias palabras, quiere que el público “sienta la textura, la oscuridad y la respiración de la historia en una sala, no en una pantalla portátil”.
Del Toro retoma el mito de Frankenstein desde un ángulo profundamente humano. Su versión no sólo explora la ambición del científico que desafía a la muerte, sino también la vulnerabilidad del ser que busca ser amado en un mundo que lo rechaza. “Es una película sobre la imposibilidad de la perfección”, ha dicho el director. “Sobre cómo aquello que creamos nos refleja, incluso cuando no queremos vernos en ello.
El resto del mundo deberá esperar a su estreno global en Netflix, el 7 de noviembre, donde la historia llegará a millones de pantallas. Pero en México, por unos días, la criatura de Guillermo del Toro llegará a las salas de cine.
