Con la llegada del otoño, la temperatura baja y el viento es mucho más fuerte y frío; además, el cambio de horario ocasiona que la rutina cambie, desde nuestra alimentación hasta la hora en la que nos vamos a dormir, y la piel se puede ver afectada; además, en esta estación se reduce la secreción de grasa y la transpiración, propiciando que se reseque y dejándola sin defensas ante a los agentes externos, lo que se ve reflejado en su salud y apariencia. Por ello, en este temporada hay que poner especial atención en el cuidado de la piel, incluyendo el workout facial en tu rutina de belleza para piel hermosa.
¿QUÉ ES EL WORKOUT FACIAL?
El fitness facial es una de las tendencias de belleza más populares de los últimos años, la cual consiste en ejercitar los músculos del rostro para mantenerlos tonificados para una apariencia más lisa, uniforme y saludable. Uno de sus principales beneficios es que brinda firmeza a los músculos de la cara, ya que cuando están tonificados, propician un efecto lifting que ayuda a una mayor definición del óvalo facial.
Otra de las grandes ventajas del workout facial es que promueve la elasticidad de la piel y disminuye la apariencia de las finas líneas de expresión. Además, estimula el flujo de la sangre y la producción de colágeno, libera toxinas por medio de un drenaje linfático y mejora la absorción de los productos faciales. Más que un masaje, consiste en ejercitar los músculos para lo cual se necesita de una técnica especial para no lastimarlos ni agredir la piel. En este sentido, los dispositivos electrónicos son muy importantes para realizar el workout facial y potencializar sus beneficios, como el Bear de Foreo que combina la tecnología de microcorriente antienvejecimiento con el masaje T-Sonic, que juntos logran entrenar y tonificar de forma segura y eficaz los músculos de la cara y el cuello en tan sólo dos minutos.
Adicional al workout facial, debes tener una rutina de skincare especial para esta época del año en la que la piel necesita mucho mayor hidratación y cuidados. Te dejamos esta que es básica, pero no olvides consultar a tu dermatólogo antes de incluir cualquier producto o fórmula.
RUTINA DE SKINCARE PARA OTOÑO
Limpieza: durante los meses de otoño la piel ya no transpira tanto como en verano, pero la limpieza debe seguir siendo un paso fundamental de nuestra rutina porque es la base de una piel saludable y hermosa. Una adecuada higiene facial nos ayuda a mantener la epidermis libre de suciedad, impurezas y células muertas, además de retrasar los signos del envejecimiento. La limpieza adecuada evita que se acumulen bacterias, que puede provocarnos acné e imperfecciones.
Hidratación y humectación: la hidratación consiste en la absorción de la humedad, mientras que la humectación atrapa y retiene la humedad. Durante el otoño la barrera cutánea de la piel se reseca a causa del frío y el viento, por lo que esta queda expuesta a daños externos, dando como resultado un aspecto opaco y con las líneas de expresión muy marcadas. La correcta aplicación de los productos dermatológicos nos ayudan a restablecer el equilibrio hidrolipídico de la piel. Cuando el daño es muy severo, es recomendable acudir con un dermatólogo.

Protección solar: este paso es indispensable todo el año, pues aunque los días de otoño son nublados, la radiación daña el cutis causando envejecimiento cutáneo, manchas y enfermedades graves. Debes aplicar el protector tanto en exteriores como para la luz de interiores. Aplica el producto por lo menos 15 minutos antes de exponerte al sol o si vas a estar frente a fuentes de luz artificial.
Prepárate para el invierno: como ya se mencionó anteriormente, el viento y el frío resecan mucho más la piel, por lo que además de los cuidados mencionados anteriormente, es muy importante que protejas tu piel desde adentro, tomando dos litros de agua al día y llevando una dieta balanceada, rica en frutas y verduras.