Cuando decidimos salir a disfrutar de una buena comida con la familia o con amigos en un restaurante, lo último que esperamos es enfrentar malos tratos o irregularidades que puedan afectar nuestra experiencia y, peor aún nuestro bolsillo.
Es en estos momentos cuando conocer nuestros derechos como consumidores se vuelve crucial, y para eso, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) está ahí para recordarnos que no estamos solos. Si has sido víctima de alguna de estas prácticas, es importante que sepas que puedes denunciar a algún establecimiento por prácticas abusivas.
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Reservaciones en restaurantes
Hacer una reservación es una práctica común que nos asegura evitar largas esperas y garantizar que nuestro tiempo en el restaurante sea placentero. Sin embargo, no siempre se respetan, lo que puede generar una frustración en el estómago vacío de los clientes.
Como comensales, debemos estar conscientes de que tenemos el derecho a que se respete tanto la fecha y hora de la reservación como el menú, los costos y demás condiciones bajo las cuales contratamos el servicio. No olvides que cualquier cargo adicional sin nuestra autorización es considerado una práctica comercial abusiva.
Un caso muy importante cuando pagamos por adelantado. Aquí el restaurante no puede negarnos el servicio de reserva y si esto llegara a ocurrir, estaríamos frente a una condición comercial abusiva.
Hay que decir que si el servicio prestado es deficiente o no se brinda por causas imputables al proveedor, tienes el derecho de exigir una compensación que no podrá ser menor al 20% del precio pagado.
De precios, propinas y consumos
Asimismo, la Profeco advierte que los precios deben estar claramente exhibidos y deben incluir impuestos. Además, no pueden incluir la propina en la cuenta, ni condicionar el acceso al restaurante exigiendo un consumo mínimo.
También es fundamental que acepten billetes de cualquier denominación y especifiquen con claridad las formas de pago aceptadas.
La Profeco enfatiza la importancia de que los consumidores conozcan y ejerzan sus derechos. Si en algún momento sientes que un establecimiento ha vulnerado tus derechos, no dudes en denunciarlo.